Una de las principales dudas que tienen aquellas personas que están al frente de las S.L. tiene que ver con el cese de las actividades de estas compañías, con los pasos a seguir para que este procedimiento se ajuste a las leyes.
Si tú también te preguntas cómo disolver una sociedad limitada, lo primero que tienes que saber es que existen tres pasos fundamentales dentro de este proceso, que son la disolución como tal, la liquidación y la cancelación de los asientos de la empresa en el Registro Mercantil, todas cuestiones que vamos a evaluar en las siguientes líneas.
Así se disuelve una Sociedad Limitada
Disolución
El primer paso consiste en la disolución propiamente dicha, lo que significa que la compañía deja de llevar a cabo una actividad con fines de lucro, y da comienzo a la liquidación del patrimonio de la empresa. Eventualmente, se produce una disolución automática cuando el capital social del negocio está por debajo del mínimo obligatorio, establecido en los 3.005,06, o cuando se dan algunas de las causas fijadas en el Estatuto de la entidad.
Sin embargo, está claro que la disolución también puede ser el resultado de la voluntad de los socios de la firma. En este caso, a diferencia de los anteriores, es indispensable que todo se acuerde en reunión de Junta General.
Hay múltiples razones para que se tome esta determinación, desde la incapacidad para que la empresa alcance los fines sociales por los que fue establecida, hasta la reducción del patrimonio contable por debajo de 1.502,53 euros.
Liquidación
Si te preguntas cómo cerrar una empresa con deudas o por otros motivos que justifiquen su desaparición, debes tener en cuenta que el siguiente paso es la liquidación, que abarca las operaciones que estuvieran pendientes. Hablamos del pago de las deudas y el cobro de los créditos, además de la publicación de un Balance Final.
Una vez elaborado ese Balance Final, se paga la cuota resultante a los socios de la compañía.
Normalmente, se trata a liquidadores que son los que llevan adelante la liquidación, y representan a la sociedad en las diferentes instancias en las que necesite de estos profesionales, como por ejemplo transacciones, juicios y/o ante cualquier reclamo de los órganos sociales, de forma que los administradores quedan relevados de esto.
Aclarado esto, la liquidación tiene como efecto la pérdida de la personalidad jurídica de la sociedad.
Cancelación de los asientos de la empresa en el Registro Mercantil
Finalmente, la cancelación de los asientos de la empresa en el Registro Mercantil es la presentación por vía escrita de la extinción de la sociedad, que se acompaña de todos los documentos que han hecho a su existencia, como libros de comercio, correspondencias, justificantes del tráfico mercantil de la compañía y otros fundamentales.
Esta escritura debe tener carácter público y presentarse ante notario, adjuntándose el Balance final, los informes de los liquidadores, los comprobantes de las deudas saldadas con los acreedores y los pagos de la cuota a los socios.
A grandes rasgos, éste es el modo en el que se disuelve correctamente una Sociedad Limitada o S.L.
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