El próximo 26 de septiembre Alemania celebrará las elecciones federales en las que los alemanes elegirán a los 709 diputados del Bundestag. Tras estos comicios se iniciará una nueva legislatura al frente de un canciller puesto que, después de 16 años de mandato, Merkel deja vacante. Sin embargo, para entender mejor estas elecciones es importante centrarse en el funcionamiento del sistema electoral alemán.
Estas elecciones son cruciales para el país germano por varias razones, en primer lugar por el fin de la “Era Merkel”, lo que hace que el panorama político sea muy impredecible y los sondeos varíen constantemente.
El sistema germano presenta la particularidad de ser mixto, pues combina el modelo proporcional (utilizado en España) y el modelo mayoritario (adoptado en Gran Bretaña y EEUU).
Cada cuatro años, los alemanes están llamados a las urnas para renovar los asientos del Bundestag, los ciudadanos emiten un solo voto pero su papeleta está dividida en dos, cada mitad elige el 50% del parlamento. La mitad de los diputados se eligen con un sistema mayoritario y la otra por sistema proporcional. Para entender cómo se lleva a cabo el recuento, es importante tener en cuenta que Alemania se divide en 299 circunscripciones electorales.
Papeleta doble
El día de las elecciones, los ciudadanos eligen en la mitad de su papeleta a un candidato concreto de su circunscripción. Con esta votación se elige a la mitad del Bundestag, 299 circunscripciones luego 299 diputados. Esta mitad de la votación se realiza por sistema mayoritario por lo que el candidato de cada circunscripción que obtenga más votos se lleva el escaño, funciona con mayoría simple.
Para la otra mitad del Bundestag se elige de manera proporcional. Para la otra mitad de la papeleta los votantes definen su preferencia por un partido, no necesariamente del mismo que eligieron en el primer voto. Con esta votación se definen los escaños que tendrá cada partido.
Otra curiosidad de este sistema es que el número de diputados del parlamento no es fijo, sino que varía en cada legislatura. En caso de que un partido obtenga más votos con la segunda columna que en la primera, podrá conservar estos diputados, denominados “excedentes”. La base está fijada en 598 escaños, pero con este sistema en el Bundestag hay actualmente 709 diputados.
¿Es útil este sistema electoral mixto?
La barrera de entrada al parlamento está fijada en el 5%, es decir, solo aquellos partidos que obtengan al menos ese porcentaje podrán acceder al Bundestag. Con las barreras de entrada se pretende favorecer la gobernabilidad y la creación de coaliciones, pues dificultan la representación parlamentaria de grupos pequeños.
Este sistema puede parecer complejo, pero es considerado como uno de los más representativos por los politólogos. Con este sistema se consigue una alta proporcionalidad al mismo tiempo que favorece las mayorías parlamentarías. Sin embargo, el sistema de doble votación puede resultar lejano para los votantes que no terminan de comprender su funcionamiento lo que puede derivar en desafección y como consecuencia en una menor participación.
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