El reloj contaba las nueve de la noche de ayer jueves y salían Monarchy a culminar su gira europea en la Joy Eslava de Madrid. Ra Balck (voz principal y guitarra) aparecía ataviado con un chaleco/gabardina reflectante y decoración en los ojos. Su compañero de viaje, Andrew Armstrong (voz secundaria y sintetizadores), con los ojos vendados vestía un traje rojo algo más recatado. También acompañaba al dúo un batería enmascarado que daba el tempo para lo que iba a ser un concierto de synth-pop de recuerdo.
El grupo repasó los temas principales de su último álbum, Mid:Night. De ocho canciones que tiene el disco dejaron sin tocar dos, probaron por primera vez en directo Cumming Coma e invitaron a cantar el tema que da nombre al álbum a la artista urbana Sandra Delaporte. De sus trabajos anteriores, deleitaron al público con, por ejemplo, Living Without You, The Phoenix Alive, Love Get Out Of My Way o Desintegration.
Black hizo uso de su tan acertado falsete durante buena parte del recital y, ciertamente, en un trabajo impecable, no desafinaba ninguna nota respecto a la grabación original. Por su parte, Armstrong aporreó las teclas de sus sintetizadores, incluso, en un impulso de euforia, se dio un paseo por la pista con uno de ellos, creando unas melodías tridimensionales que remataban un trabajo a la altura de su compañero.
Y es que Monarchy sólo dejó tiempo para respirar en la espera a los bises, después de culminar su listado de canciones con una versión bailable de Lithium, de Nirvana. Lo que se sucedió antes fue un constante despliegue de temazos que superaron las respectivas versiones de estudio. La verdad es que los chicos de Monarchy lo dieron todo en esta última fecha, pero no se vieron correspondidos por un público que aplaudía y vitoreaba más bien poco, aunque alguno lo intentaba y un par de fanáticas incondicionales de primera fila lo daban todo.
