El Gobierno ha asumido que no podrá presentar los Presupuestos de 2020 debido a la situación excepcional en la que se encuentra España. Mientras, Sánchez, se encuentra preparando unas cuentas de reconstrucción para cuando acabe la emergencia sanitaria por el COVID-19.
Las cuentas de este año deberán esperar hasta 2021. Unos Presupuestos que iban a dejar atrás los de 2018 del ministro del PP, Cristóbal Montoro, vuelven a prorrogarse debido a la crisis sanitaria en la que se encuentra España. El Ministerio de Hacienda insiste en que mantendrá la hoja de ruta y seguirá trabajando en el proyecto de ley para el año que viene. Sin embargo, la realidad es bastante distinta.
Los esfuerzos del Gobierno por salvar la crisis del coronavirus han obligado a la paralización de la economía española, por lo que los ministros comienzan a dar por sentado que las cuentas de 2020 no saldrán a la luz.La prioridad ahora mismo es superar la situación de emergencia sanitaria en la que está inmersa el país por la pandemia del COVID-19. Los departamentos económicos del Gobierno se encuentran rebuscando entre los Presupuestos para encontrar más recursos que se puedan destinar a la sanidad pública. Sin embargo, la crisis no solo es sanitaria, la economía se está viendo verdaderamente afectada, desencadenando una recesión a la que el Gobierno deberá enfrentarse lo antes posible.
Previsiones desesperanzadoras
La declaración del estado de alarma ha obligado a gran parte del sistema productivo español a ponerse en cuarentena, y para mitigar este golpe, Sánchez ha puesto en marcha dos decretos para PYMES y autónomos. Un total de 230.000 millones de euros que ha destinado a anticipos a las comunidades para sanidad, moratoria fiscal y cotizaciones para los más afectados. Solo este mes de estado de alarma costará a la Administración central más de 5.000 millones de euros.
Los Presupuestos de este año fueron diseñados con unas previsiones económicas que por ahora se quedarán en proyecto. Se preveía un crecimiento del PIB del 1,6%, que con la crisis del COVID-19 terminará quedando en números rojos. El propio Sánchez declaraba que “2020 no tendrá 12 meses, sino diez o incluso nueve” en referencia a la actividad económica del país. Los objetivos de deuda y décifit público que validó el Congreso, también se presentan inalcanzables.
Si el Ejecutivo desea salvar la situación tan crítica en la que nos estamos embaucando, deberá aprobar los decretos suficientes para abordar los próximos Presupuestos de 2021 como un proyecto para sacar el país adelante. El plan del Presidente es sacar unas cuentas en septiembre que marquen la ruta para el año que viene. Por ahora, Sánchez, deberá meditar por donde empezarla antes de marcar la cruz en el mapa.
Foto: Adobe Stock
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