Un día soleado y un calor que no corresponde al mes de octubre dieron la bienvenida a los eurofans que asistieron al Palacio de la Prensa de Madrid. El XIV Congreso de Eurovisión organizado por la OGAE (Organización General de Amantes de Eurovisión) de España acogió el pasado 5 de octubre a más de 500 personas que disfrutaron de un ambiente festivo y musical con artistas que han sido muy importantes en la historia del festival de Eurovisión.
Escriben Brian Bujalance y Alba Moreno
David Feito
El que fuera miembro de El Sueño de Morfeo fue el primero en subir al escenario del Palacio de la Prensa de Madrid. Su grupo representó en Eurovisión a España en 2013 con Contigo hasta el final, un tema con sonidos celtas que se clasificó el penúltimo. “Teníamos claro que íbamos a parar después de 2013. Fue ahí cuando tuvimos la llamada de Eurovisión», afirmó. Y así fue. No obstante, Feito siguió componiendo y este año presentó ‘Muérdeme’, la canción favorita para que María Villar representara a España en el certamen. No obstante, el compositor reconoció que «el tema iba para Lola Índigo. Nos encajaba para María cuando la enviamos», y lamentó que «luego supimos que no quería ir. Pensaba que tenía mucho poder de convicción pero no. Tuve una charla con ella y me dijo sí sí sí pero no». Es más, admitió que “si tengo un artista que va a vivir todo el proceso de forma incómoda, prefiero que no vaya”. Feito recuerda su paso por Eurovisión con cariño, aunque admitió que «Raquel, Juan, David, toda la delegación y yo tuvimos una mala noche y una mala semana», y afirma que volvería al certamen mañana, aunque «sería más útil como compositor». Feito considera que algo latino-urbano es una buena propuesta para España «por la percepción que nos tinene los europeos».
Carmelo Martínez
Uno de los integrantes del reconocido grupo que representó en el 1988 a España en el Festival de la Canción, Carmelo Ramírez, llegó al Congreso de Ogae España con mucha alegría y amor para los eurofans. El integrante de La Década Prodigiosa se emocionaba al decir que cuando fueron a Eurovisión «Éramos número 1. Nos hizo mucha ilusión. Nunca me arrepentiré, fue una experiencia increíble”. Una de las anécdotas más curiosas que les pasó durante su preludio al festival llegó cuando no le dejaron entrar a una gala eurovisiva. «Gerard Colling -representante de Países Bajos en ese año- dijo que iba a ser mi madrina para poder actuar esa noche porque perdí mi acreditación», comentaba. Con confianza y sinceridad durante toda la entrevista, aseguró que RTVE los respetó al máximo aunque sí «eché de menos un poco de roce», recordando que recibió un telegrama de Pilar Miró. Si tuviera que quedarse con alguna canción y cantante sería con la de Massiel, por la «sinceridad cuando está cantando». Junto a su nuevo grupo de versiones, El Guateque de la Década, interpretó Made in Spain (la chica que yo quiero), canción que nos representó en el 1988.
Serafín Zubiri y Anabel Conde
Dos grandes artistas españoles que representaron en nuestro país los años 1992, 2000 (Serafín Zubiri) y 1995 (Anabel Conde) llegaron unidos y con mucha complicidad. Zubiri comenzó considerando que «es un lujo para cualquier cantante ir a Eurovisión». Para él, «es uno de los hitos más importantes de mi carrera». Nunca entenderá que alguien se reniegue a participar. Aunque tiene un gran recuerdo de las dos grandes experiencias, admitió que las dos fueron muy distintas. Prefiere la orquesta en directo porque le da autenticidad, aunque opinó que “yo toqué el piano en directo, y creo que no se valoró». Por su parte, Conde, que estuvo a punto de convertirse en la ganadora del Certamen en su año, comentó cómo se conocieron. Faltó hablar un poco más de la etapa musical de Anabel y de su trayectoria por el fesival. Con su actuación de Vuelve Conmigo y su extraordinaria voz volvió a poner los pelos de punta, al igual que cuando más tarde interpretó junto a Zubiri Quédate Conmigo.
Ambos artistas acudieron al Congreso de OGAE España para presentar su nuevo proyecto. “Fíjate si Eurovisón es importante en mi vida que voy a hacer un espectáculo monográfico. Le debía un espectáculo al Festival», detalló Zubiri. Y así es. Lo presentó en exclusiva en pleno centro madrileño a centenares de eurofans. Su próximo proyecto junto a Anabel Conde será Festiband Eurovisión y se estrenará en el recinto Euskalduna Bilbao el 1 de marzo a las 12:00 horas. Los asistentes disfrutaron en directo de algunas de las canciones que intepretarán. Fue un bonito recuerdo por la historia del Festival el que se vivió con dos potentes voces.
Tamara Todevska
La segunda parte del Festival comenzó con la alegría de saber que Blas Cantó nos representará en 2020. Aunque muchos esperaban que Ruth Lorenzo repitiera, la mayoría se alegró por la trayectoria profesional del cantante. Llegaba el turno de Tamara Todevska. La macedonia consiguió la clasificación más alta de Macedonia en Eurovisión este año. Una octava posición gracias al voto del jurado, que la convirtió en favorita contra todo pronóstico. La cantante reconoció en el Congreso de OGAE España que, cuando le ofrecieron participar en el festival, aceptó inmediatamente pese a que acababa de dar a luz a su segundo hijo. «Me llamaron de la televisión Macedonia, acababa de dar a luz y me preguntaron si quería ir a Eurovisión. Dije que sí, nací preparada”. Quizá no transmitió ilusión en la entrevista, pues parecía que se quisiera marchar, pero sí durante una actuación en la que interpretó su tema, Proud, pero también «su favorita», Soldi, que hizo quedar a Italia en segunda posición. Menuda voz. También hubo tiempo para presentar su nuevo álbum, que tendrá temas en macedonio, serbio e inglés”.
Izhar Cohen
El ganador de Eurovisión de 1978 volvió a España después de 30 años sin coger un avión para participar en el Congreso de OGAE. El intérprete de la archiconocida A Ba Ni Bi, tuvo problemas con el visado para entrar a España en plena transición democrática, y decidió no volver a volar. Pero el cantante superó su miedo viajando al país ganador del certamen en 1968 junto con su hija, sus amigos y algunos de los profesionales que le ayudaron con su fobia a volar. El israelí levantó a los eurofans del Palacio de la Prensa con la canción con la que ganó, pero también con Olé Olé, el tema que le condujo al festival en 1985. En el escenario le acompañó parte del público y de sus acompañantes en una actuación festiva que también provocó lágrimas de emoción en más de uno. Uno de los mejores momentos del Festival, de fiesta, de alegría y de emoción.
Anna Bergendahl
La sueca acudió radiante al congreso, con una sonrisa que irradiaba ilusión. Anna Bergendahl representó a Suecia en 2010 con This is my life, pero no logró clasificarse en la final. De hecho, admitió que «me sentí decepcionada durante una semana o dos. Suecia siempre se clasifica, pero recibí mucho amor». Por eso, reconoció que «me daba mucho miedo volver, pero tenía un buen tema. Puede que vuelva algún día». Su paso por el Festival lo llegó a comparar con la participación en las olimpiadas. “Me sentí como una estrella del rock. Es como para un atleta ir a los Juegos Olímpicos».
Azúcar Moreno
Si hubo algún grupo eurovisivo para terminar el Congreso de OGAE España, ese era el de las Azúcar Moreno. Muy simpáticas, recordaron que cuando participaron ya tenían varias discos pero que «nos quedamos con el disco de Bandido porque marcó nuestra vida». También hubo momento para recordar la anécdota eurovisiva. Cuando actuaron, la melodía empezó a sonar anter y se tuvieron que marchar rápidamente del escenario para más tarde empezar. «Lloramos con el corazón porque nos quitaban nuestro sueño», declararon. Hubo un momento durante la entrevista que parecía una conversación de debate entre ambas, convirtiéndose en una escena del programa Sálvame. Pero en este caso criticando a Jorge Javier Vázquez y a Mediaset. Las Ázucar Moreno lamenataron que por su parte «fue un error Supervivientes» pero que «esta cadena se piensa que son imprescindibles para todo: no necesitamos a Mediastet. Se humilló el solo». Los eurofans estaban muy contentos por la naturalidad de Encarna y Toñi, que provocaro muchas risas, pues como ellas afirmaban «en el fondo somos niñas pequeñas». Para ellas, el logro más grande «es estar todavía aquí». El Congreso no podía acabar de mejor manera que con la interpretación de Bandido. Un día que todos los asistentes recordarán.
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